lunes, 30 de enero de 2012

Té Sencha japonés (Clearspring)

Un té para meditar

            Este té Sencha (una variedad japonesa de té verde) de la marca Clearspring, viene en una caja de 20 bolsitas de 2.5 g.. En su interior nos encontramos con dos bolsas de papel metálico, herméticamente cerradas, que contiene cada una 10 bolsitas, lo que pretende contribuir a su mejor conservación, aunque sería mejor el envasado individual. Las bolsitas individuales tienen un aspecto delicado, como de seda (no es así, pero tiene una textura y un brillo que lo recuerda).

            Es un té de cultivo orgánico que hay que infusionar durante sólo 1 o 2 minutos.

            Este té lo compré en una herboristería de L’Eliana (Valencia) y básicamente fue porque la caja me atrajo. La estética zen y el gradiente verde me supo cautivar.


            El té Sencha es uno de los tes verde más populares en Japón. De hecho “sencha” significa literalmente “común” en japonés. Proviene de Nagata Chaen, en la región de Kyoto, y está hecho con las primeras hojas de té de la temporada recogidas cuando tienen sus aromas más potentes al final de la primavera, realizándose un cultivo de forma totalmente orgánico.

            Esta variedad de té se obtiene sólo de la recolección de hojas jóvenes. Se consigue a partir de la hoja entera de té, sin ningún tipo de proceso de molienda, y su secado se realiza exponiendo directamente las hojas a la luz solar. Además, la fermentación del té verde japonés se detiene (para que se mantenga como té verde y no se convierta en té negro o rojo) mediante vapor de agua, lo que preserva mejor el sabor y el aroma, a diferencia del té chino que se realiza mediante el calentamiento en planchas. Posteriormente se empaquetan directamente para que conserven sus aromas originales.

            El té Sencha posee propiedades adelgazantes y diuréticas (por otra parte, como la inmensa mayoría de tes), es rico en vitamina C y tiene un bajo contenido en teína.

             La tarjeta y la valoración (Cómo y por qué)




            Sensaciones

            En seco, presenta un olor intenso con un fondo tostado. Sin embargo, la infusión cambia totalmente de aroma. Curiosamente es menos intenso y muestra un toque agrio. Huele como a hierva recién cortada.

            El color es amarillo brillante, muy clarito, neblinoso. Al mirar a su través da la sensación de luminiscencia. Mientras se está infusionando, forma una espumita blanca que desaparece rápidamente al extraer la bolsita, quedando la taza totalmente homogénea, limpia.

            El sabor es muy suave, excesivamente suave. A los paladares acostumbrados al azúcar (la mayoría de nosotros) le puede resultar ligeramente amargo, sin embargo, se puede tomar solo dada su falta de intensidad.

            A medida que el nivel de la taza va disminuyendo, notas como cada vez te va gustando más. Es como si el sabor se fuese acumulando en la boca y cada vez lo notas más. Un poco es como si el té te fuese enseñando a saborearlo.

            El resultado final es una sensación de relajación muy agradable.

            En la valoración, la nota adquirida es de 83 (sobre 120), lo que representa un 6.92.  Es nuestra primera cata y no tenemos referencia. No sabemos si va a ser una nota alta o baja.



             Otros sentidos

            Una música adecuada para este té puede ser música de shakuhachi, flauta japonesa. En concreto el tema tradicional llamado Kumoi Jishi. Música y té harán que tu entorno se diluya y te sientas realmente relajado.


           Para relajar la vista: